Las encías, una parte fundamental de nuestra salud bucodental, son, a menudo, las grandes olvidadas. Que estén sanas no es sólo bueno para lucir una bonita sonrisa, sino también para evitar complicaciones a largo plazo. Sin embargo, es común enfrentarnos a diversos problemas relacionados con ellas, entre los cuales destacan las heridas en las encías. Estas pueden ser causadas por diversas razones, desde un simple cepillado inadecuado hasta enfermedades bucodentales más serias.

Así que como sabemos lo incómodo que resulta tener este pequeño traumatismo ahí, a lo largo de este artículo intentaremos proporcionar recomendaciones sobre cómo evitarlas y, por supuesto, también sobre cómo curarlas. Si vives en Málaga, nuestros dentistas especialistas en periodoncia te ayudarán a resolver cualquier problema con tus dientes y encías.

Causas de las heridas en las encías

Heridas en las encias

Cepillado inadecuado

El cepillado dental es básico para mantener una buena higiene oral; sin embargo, si se realiza de manera incorrecta, puede terminar produciendo heridas en las encías. El uso excesivo de fuerza, cepillos con cerdas duras o movimientos bruscos agreden la delicada membrana gingival. Además, el hábito de cepillarse inmediatamente después de consumir alimentos ácidos debilita el tejido, haciéndolo más susceptible a las lesiones. Por eso, hay que procurar escoger un cepillo adecuado y adoptar técnicas suaves y circulares que protejan esta área tan sensible.

Uso de productos agresivos

El mercado ofrece una amplia variedad de productos de higiene bucal, pero algunos contienen ingredientes que, aunque buscan ofrecer una limpieza profunda, resultan demasiado abrasivos para las encías. Enjuagues bucales con alto contenido de alcohol o pastas dentales con partículas demasiado rugosas pueden irritar y lesionar el tejido gingival. Lo recomendable es leer las etiquetas y optar por aquellos artículos que respeten el pH natural de la boca.

Traumatismos

Las heridas accidentales son otra de las causas habituales de las lesiones en las encías. Ya sea por morderse mientras se come, el uso de utensilios dentales de forma inapropiada o incluso accidentes deportivos, cualquier golpe o corte puede dañar esta zona.

Enfermedades bucodentales

Enfermedades como la gingivitis o la periodontitis provocan heridas y úlceras en las encías. Estas afecciones, relacionadas con la acumulación de placa bacteriana, inflaman y debilitan el tejido, lo que puede llevar a sangrados y heridas. La detección temprana y el tratamiento adecuado son esenciales para evitar complicaciones.

Cómo curar las heridas en las encías

Técnicas adecuadas de cepillado

La primera línea de defensa contra las heridas en las encías es una técnica de cepillado correcta. Cuando vayas a comprar un cepillo, opta por aquellos que tengan cerdas suaves y realiza movimientos cortos y suaves, evitando presionar demasiado sobre las encías. Mantén el cepillo en un ángulo de 45 grados respecto a tus dientes, limpiando tanto la superficie dental como el borde de las encías. Además, usar pastas dentales con ingredientes antiinflamatorios ayuda a reducir la irritación y promover la curación.

Remedios caseros

Desde tiempos ancestrales, se han empleado diversas sustancias y métodos naturales para tratar afecciones bucales. El enjuague bucal con agua salada, por ejemplo, es uno de los remedios más populares ya que es de sobra conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Esta simple mezcla ayuda a desinfectar la zona afectada, reduciendo el riesgo de infecciones y acelerando el proceso de curación.

Por otro lado, el aloe vera, una planta con reconocidas propiedades calmantes y curativas, puede ser aplicada directamente sobre la herida para aliviar el dolor, reducir la inflamación y promover una rápida cicatrización.

Aloe vera beneficioso para las encías

Asimismo, el té de manzanilla, al enfriarse y utilizarse como enjuague, es una excelente opción para calmar las encías irritadas, gracias a su acción como antiinflamatorio natural.

En cualquier caso, no olvidar que, aunque estos remedios caseros pueden ser de gran ayuda en muchas ocasiones, es necesario consultar a un profesional si los síntomas persisten o empeoran.

Productos específicos

Existen en el mercado varios artículos diseñados específicamente para tratar y aliviar las heridas en las encías. Los geles y colutorios bucales con ingredientes como la clorhexidina, un componente que previene las infecciones, se pueden comprar en cualquier farmacia.

Por su parte, los productos con ingredientes naturales, como el propóleo o el aloe vera, también pueden ser beneficiosos en el tratamiento de estas lesiones.

Consulta al dentista

Si bien muchos casos de heridas en las encías pueden tratarse en casa, se vuelve necesario acudir a un profesional cuando las heridas son recurrentes, no muestran signos de mejora después de una semana o se acompañan de otros síntomas como fiebre o hinchazón extrema.

El dentista en Málaga realizará una evaluación detallada, para identificar la causa que hay detrás y recomendar el tratamiento más adecuado.

En algunos casos, incluso, podrían ser necesarias intervenciones específicas o medicamentos para tratar infecciones o enfermedades periodontales.

Prevención: lo más importante

La prevención es el pilar más sólido y efectivo en la protección y cuidado de nuestra salud bucodental. Asegurar que nuestras encías estén libres de heridas y en un estado saludable es una responsabilidad que va más allá de una simple rutina: es un compromiso diario con nuestra salud general.

El hábito de cepillarse los dientes al menos dos veces al día es esencial. Sin embargo, para una limpieza profunda y efectiva, también habría que incorporar el uso regular del hilo dental. En este artículo te explicamos cómo utilizar el hilo dental correctamente. Juntos, estos hábitos eliminan la placa bacteriana, esa capa pegajosa que se forma sobre los dientes y que, de no ser tratada, puede conducir a enfermedades que desencadenen heridas en las encías.

Cómo usar hilo dental correctamente

Pero la prevención no se detiene en casa. Las visitas periódicas al odontólogo, recomendadas al menos dos veces al año, son cruciales. Estas no solo permiten realizar limpiezas profesionales, sino que también posibilitan la detección temprana y el tratamiento de problemas antes de que evolucionen a afecciones más serias y difíciles de manejar.

De igual manera, la alimentación también juega un papel determinante. Una dieta equilibrada, rica en vitaminas y minerales, especialmente en vitamina C y calcio, nutre y fortalece las encías y los dientes desde el interior

Por último, aunque no menos importante, está el factor del tabaquismo. Es ampliamente conocido que el tabaco afecta negativamente la salud bucal. El acto de fumar debilita el sistema inmunológico y aumenta el riesgo de infecciones en las encías. Así que abstenerse de este hábito no solo protege las encías, sino que también promueve una salud bucal y general óptima, que al fin y al cabo, es lo más importante.

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