Las llagas bucales, como se les conoce habitualmente, son un problema bucal que puede llegar a ser muy molesto y deberse a diferentes motivos. Es muy común entre niños y adolescentes de entre 10 y 19 años de edad.
Aunque popularmente las llamemos llagas, su nombre es “afta”, el cual proviene del griego “ἄφθαι, aphtai”. A modo de introducción, un afta es una lesión muy similar a una pequeña herida que puede localizarse en diferentes puntos de la boca.
En este artículo vamos a explicarte qué son, a qué se debe su aparición y, además, te daremos una serie de consejos para evitar su aparición.
Índice del artículo
¿Qué son las llagas bucales?
Una llaga bucal, o afta, es una úlcera abierta que provoca dolor o molestias al paciente. Presentan un color blanco, o amarillento en algunos casos, y están redondeadas por un área roja y brillante.
Pueden aparecer de manera única o formando grupos de varias llagas en distintas zonas.
A pesar de su pequeño tamaño, de entre 3 y 8 mm, pueden ser muy molestas hasta que desaparecen, que suelen tardar unos 10-14 días.
¿Son graves?
Por norma general, este tipo de lesiones no presentan ninguna gravedad más allá de los 10-14 días de molestias que provocan.
En aquellos casos, especialmente en fumadores, que las llagas no remitan en este periodo de tiempo, o que se repitan con demasiada frecuencia, el paciente deberá acudir a su médico para analizar y estudiar si existe otra enfermedad subyacente que provoque su aparición.
¿Por qué aparecen?
En cuanto a su origen, no existe un origen claro y único que provoque su aparición. Las llagas bucales pueden aparecer por:
- Reacción inmunológica frente a bacterias.
- Déficit vitamínico.
- Alergias a alimentos.
- Estrés excesivo.
- Cambios hormonales.
- Heridas provocadas por:
- Traumatismos.
- Mordeduras.
- Ingesta de alimentos o bebidas muy calientes.
- Predisposición genética.
Tipos de llagas bucales
Los especialistas del sector suelen englobar las llagas bucales en tres tipos dependiendo de su morfología:
- Menores: suponen la gran mayoría de casos. Son las llagas que aparecen en solitario y se curan naturalmente en unos 7 días.
- Mayores: en este grupo se encuentran aquellas llagas únicas con más de 1 cm y que precisan de más de 1 semana para que se eliminen.
- Herpetiformes: se trata de grupos de llagas que aparecen de manera simultánea. Tienen un tamaño reducido.
Así mismo, las llagas bucales se pueden agrupar según su gravedad. De esta manera encontraríamos: agudas, crónicas y recurrentes.
¿Cómo curar llagas en la boca?
No es habitual que se requiera de un tratamiento para las llagas bucales, ya que suelen desaparecer solas una vez transcurridos los 10-14 días anteriormente comentados.
Los tratamientos que se suelen recomendar van encaminados a aliviar el dolor de estas y a reducir su inflamación. Entre ellos se encuentran:
- Corticosteroides.
- Antisépticos locales.
- Anestésicos locales (lidocaína al 2%).
- Evitar el consumo de comidas muy condimentadas y ácidas.
Consejos de un dentista para tratar las llagas bucales
Desde Rubal Dental queremos darte una serie de consejos y recomendaciones para tratar de evitar la aparición de estas aftas bucales, aunque en función de la casuística particular de cada paciente, puede ser muy complejo evitar su aparición.
Nuestros consejos son:
- Reducir el estrés de tu día a día.
- Mantén una correcta higiene bucal.
- Evita el consumo de alimentos muy calientes.
- Evita el consumo de alimentos que te provoquen reacciones alérgicas.
- Mantén una dieta equilibrada y completa.
Esperamos que este artículo te haya sido de interés y que te haya servido para conocer mejor este problema de salud bucodental. Si adviertes su presencia, de manera preventiva, te recomendamos que acudas a nuestras clínicas dentales de Málaga para evaluar el origen de las mismas, así como la necesidad de tratamiento para aliviar el dolor y eliminarlas cuanto antes. Pide cita a Rubal Dental.