La oclusión de las piezas dentales se produce cuando cerramos la boca y las piezas dentales se juntan. Si todo está correcto, las piezas encajarán a la perfección, alineadas y sin ningún músculo o tendón sufriendo tensiones o desgaste. Pero existen ciertos casos en los que este mecanismo/proceso de oclusión falla, es cuando se producen las conocidas maloclusiones dentales.

Este problema es muy común entre los pacientes, ya que no es tan común que presenten una alineación perfecta u otra serie de problemas que hayan derivado en un tipo de maloclusión dental.

En este artículo vamos a abordar esta temática de una manera integral, explicándote qué son, qué tipos existen, por qué se generan y cómo podrían tratarse.

¿Qué es una maloclusión dental?

Se puede definir como el mal cierre de la mandíbula, el cual se produce por una irregularidad en el contacto, y encaje, de las piezas de los maxilares superiores con los inferiores.

¿Qué es una maloclusión dental?

Tipos de maloclusiones dentales

No existe un tipo genérico de maloclusión dental, existen matices que las diferencian unas de otras. La agrupación más habitual para las maloclusiones dentales son:

Maloclusiones verticales

Se generan cuando las piezas sufren desviaciones en el eje vertical, es decir, se abren hacia afuera de la boca o hacia adentro.

A su vez, dentro de este grupo encontramos los siguientes tipos de maloclusiones verticales:

  • Mordida abierta. Exceso de distancia entre incisivos superiores e inferiores, quedando espacio entre ellos al tratar de cerrar.
  • Sobremordida. Las piezas superiores solapan las piezas inferiores.
  • Mordida de borde a borde. Se da cuando los incisivos cierran borde con borde.

Maloclusiones transversales

Este tipo de maloclusión se basa en cambios en el ancho de los maxilares, generando anomalías en la inclinación de los dientes, dando lugar a los siguientes casos:

  • Mordida cruzada. Se produce cuando el arco superior se encuentra dentro del arco inferior. Suele generar una mandíbula excesivamente estrecha.
  • Mordida en forma de tijera. El arco superior se encuentra completamente fuera de los dientes inferiores.

Maloclusiones sagitales

Se trata de una serie de maloclusiones, clasificadas por las clases I, II y III, que se dan en el plano anterior-posterior de la mandíbula:

  • Clase I. Aunque existe una mordida correcta, la línea de la mordida no es correcta, debido al apiñamiento, rotación u otros problemas de algunas piezas dentales. Suele afectar a la masticación y aumenta las posibilidades de generar caries.
  • Clase II. El arco superior se encuentra más adelantado que el inferior. Puede ir acompañado, o no, de apiñamiento de algunas piezas dentales.
  • Clase III. Se da cuando el arco inferior se encuentra frente al arco superior.

¿Detectas alguno de estos tipos en tu mandíbula o en la de algún familiar? En ese caso te recomendamos que contactes con nosotros para analizar tu mordida y el funcionamiento de tu mandíbula.

Causas de aparición de la maloclusión dental

Como es habitual en la mayoría de problemas dentales, existen numerosos factores y causas que pueden provocar la aparición de las maloclusiones dentales. Entre ellos destacan:

  • Defectos congénitos, factores genéticos.
  • Malos hábitos, como morder objetivos excesivamente duros.
  • Uso inadecuado del chupete en la infancia.
  • Pérdida de piezas dentales.
  • Anomalías en el tamaño de una o varias piezas dentales.
  • Respiración oral.

Causas de aparición de la maloclusión dental

Como has podido comprobar, existen numerosos factores que pueden provocar su aparición. La mejor manera de evitar que se generen es acudir con frecuencia al dentista desde que somos pequeños, de manera que se controle la evolución de las piezas dentales, así como su funcionamiento y las oclusiones. Pide cita en Rubal Dental.

Consecuencias de estas patologías

Además de los defectos y consecuencias estéticas, que son las que más llaman la atención a los pacientes que padecen este problema, las maloclusiones dentales pueden traer consigo otra serie de patologías, como por ejemplo:

  1. Problemas de higiene bucal.
  2. Mayor probabilidad de padecer caries.
  3. Bruxismo.
  4. Dolores en la mandíbula.
  5. Molestias en la cabeza, cuello y espalda.
  6. Problemas para respirar e, incluso, para tragar alimentos.

¿Cómo es su tratamiento?

El tratamiento más común de las maloclusiones dentales es la ortodoncia, tanto con brackets como con cualquier otra modalidad. Tras un estudio previo, el ortodoncista puede planificar un tratamiento de ortodoncia que pueda dar solución a cualquier tipo de maloclusión.

Tratamiento de las maloclusiones dentales

Acude a un dentista

Si adviertes la presencia de algún tipo de maloclusión en tu boca, no dudes en pedir una cita en Rubal Dental. Una vez acudas a cualquiera de nuestras clínicas de Málaga, estudiaremos tu caso y te ofreceremos varios tratamientos para solucionar este problema.

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